Junto al río de coches que discurre por el lecho de asfalto de la M40, se alzan unas suaves colinas tapizadas de hierba, que ocultan los escombros de las casitas bajas que constituyeron buena parte del barrio de Palomeras, hoy Madrid Sur.
Los elevados edificios de las nuevas Palomeras se alzan sobre la avenida de Miguel Hernández que recorre el Parque Lineal de Palomeras desde la estación ferroviaria de El Pozo hasta el puente que une Vallecas con Moratalaz sobre la A3.
En esta encajonada linea verde habitan plátanos de sombra, acacias de flor blanca (robinias), negundos, melias (cinamomo), robles, álamos, ailantos y otros muchos árboles, que aunque no llegan a alcanzar un gran porte, debido a la pobreza del suelo y la escasez de agua; si dan cobijo a multitud de pájaros.
Pinzones, gorriones, palomas domésticas, torcaces, mirlos, estorninos, hurracas, cotorras, colirrojos, petirrojos, papamoscas, carboneros, herrerillos, aviones, golondrinas, pito real, abubillas, alcaudones, ... son fáciles de observar en distintas épocas del año.
Un nutrido surtido de plantas herbáceas compiten con la grama y el cesped. Verdolagas, diente de león, verónicas, galeotas, grama del norte, trébol, alfalfa, llantén, fumaria, achicoria, .... cubren el desnutrido suelo de este parque urbano.
Por sus caminos corren y pasean jóvenes y mayores, hombres y mujeres, en busca de un espacio abierto en el que poder oxigenarse, hacer ejercicio y contemplar el horizonte que une al cielo y la Tierra. En sus lagos se pueden observar ánades reales y alguna carpa que otra (dependiendo de la "limpieza" de las aguas). Por su espácio aéreo se ven bandadas de gaviotas en formación, transitando hacia el "comedero" de Valdemingómez. Ultimamente las cigüeñas se han hecho mucho más frecuentes, utilizando las antenas de televisión como dormitorios.
Más de 3 kilómetros acompañando al carril bici desde Valdebernardo hasta Entrevías. Un pulmoncillo para miles de urbanitas de este rincón vallecano.
Hacía tiempo que no pisaba tu blog donde bien representas ese parque lineal que yo sigo aún corriendo por sus cuarenta y tantas ondulaciones. Siempre lo recorro/corro así. Seguro que alguna vez nos hemos cruzado. Que sepas que compartimos mucha visión. Algún día deberíamos saludarnos.
ResponderEliminarUn abrazo, desde el barrio.
Un poco abandonado tengo(me) ese Parque Lineal. Correr no puedo pues gordito ando y lesionarme no quiero. Infiel le estoy siendo a este parque, al trajinarme el Retiro, el Campo del Moro, el Capricho, la Casa de Campo y las plazuelas de los madriles.
EliminarMe satisface que compartamos ideas y visiones. Cuando quieras nos saludamos. Un abrazo vecino.